Los profesionales pueden acceder a todos los documentos (incluidas pruebas, imágenes, analíticas, …) que haya compartido el paciente en cada una de sus consultas, incluidas las Videoconsultas y las consultas por escrito, así como obviamente a todos los documentos e informes generados por el propio médico o psicólogo con cada paciente en el desarrollo de su actividad.
Respecto a la historia clínica del paciente, el profesional sólo puede acceder si el paciente lo autoriza expresamente y en cada caso (lo cual es habitual para garantizar una correcta atención) y sólo durante un periodo de tiempo determinado.